El Trastorno del Espectro Autista (TEA) se define como una alteración de determinadas funciones del Sistema Nervioso Central dando lugar a la aparición de dificultades concretas en el área social, comunicativa y cognitiva.
Las personas con TEA presentan con mayor o menor intensidad las siguientes características:
- Déficits en la comunicación y el lenguaje
- Déficit en la interacción social
- Patrones de conducta y comportamiento restringidos y/o repetitivos.
- Déficit del procesamiento sensorial: inadecuada regulación de los estímulos sensoriales del entorno. Pueden ser hiperreactivos o hiporeactivos.


En el centro Napsis elaboramos un Programa de atención individualizada para cada niño con trastorno del espectro autista en función de sus necesidades, el contexto familiar y social, la edad y las características propias.
A través de un programa de seguimiento continuo vamos ajustando los objetivos a las necesidades reales y actuales de cada persona.